With you.

Y no, antes de que preguntes, no lo sé; no sé si te quiero, no sé si me gustas, no sé si solo te deseo, no sé ni siquiera si podría estar enamorándome de ti...
Sé que me miras y me pongo nerviosa, sé que me sonríes y sonrió yo, como algo automático, como si tu sonrisa arrastrara a la mia a través de un hilo invisible, sé que me gusta tu boca, sé que te abrazaría al menos 500 veces al día, sé que me alegro cuando sé que te voy a ver, sé que el día no es lo mismo si quedamos todos y tú no vienes, sé que pienso en ti a menudo, demasiado quizá, sé que me encantaría saber que piensas en mí... sé que cuando me preguntas: "¿Qué tal?, te diría: "Bien, con ganas de ti".

Cada película que vemos, cada historia que nos cuentan, nos piden que creamos en ellas... Creo que soy demasiado ingenua y soñadora. Ya me dí cuenta que ese chico perfecto NO EXISTE. Creo que he estado demasiado obsesionada con encontrar mi historia perfecta, mi cuento ideal. Lo sé, NO OCURRIRÁ.
Pero vivo en una constante desilusión; las personas NUNCA son como dicen ser.
Quizá el final feliz sea simplemente pasar página.

Puede que seamos diferentes y poco compatibles, pero ya sabes lo que dicen: los polos opuestos se atraen. Seguramente nadie puede asegurar que he aprendido a vivir con tus defectos, errores y sobre todo tus obsesiones. Nadie, excepto yo. He aprendido que todo el mundo tiene defectos, y no te culpo por ello porque hasta yo tengo defectos y ahora gracias a ti ya sé que nadie es perfecto.
Seguro que a ninguna chica le gusta que le llames tonta, pero a mi sí. No sé el verdadero motivo, pero me encanta que vengas y me llames tonta. 
Me encanta que me llames gilipollas cuando me equivoco y me hagas reír haciendo el idiota. 
Me encanta que no me hagas caso, te equivoques y decirte: ¡Te lo dije!
Tal vez no seas el prototipo de chico perfecto, porque el chico perfecto no existe; pero no me importa, me gustas tal y como eres. Y eso a día de hoy es imposible que lo cambien.