Te daré mi corazón, para que solamente sea tuyo y de nadie más. Porque dudo que alguien más pueda llenar esos vacíos de mi corazón. Tendremos momentos buenos, momentos malos, pero te prometo que cada uno de esos momentos será inolvidable y que no nos arrepentiremos nunca de ninguno de ellos. Porque pienso hacerte feliz, porque pienso pensar solamente en ti. Y cuando sientas que estoy lejos, cuando sientas que no me tienes a tu lado, piensa en todo lo bueno nuestro, eso hará más corta la distancia y secará nuestras lágrimas.

¿Cómo pretenden que me porte bien?

Si de pequeña veía que Tarzán andaba desnudo, Cenicienta llegaba a media noche, Pinocho mentía, Batman conducía a 320 km/h, la Bella Durmiente era una vaga, Blancanieves vivía con 7 tios, Caperucita no le hacía caso a su madre, Betty Bop iba vestida como una fulana, Pulgarcita tiraba migas por todas partes y Popeye fumaba hierba.

Abrázame, pero esta vez no me vuelvas a soltar. Disfrutemos de nuestro momento sin pensar en los demás, dejemos que todo lo de nuestro alrededor se haga insignificante comparándolo con lo nuestro. No permitamos que la magia muera, no dejemos que pase. Te prometo despertarte siempre que duerma a tu lado con un "buenos días mi príncipe" y una de mis mejores sonrisas acompañada con un beso irreemplazable, como todos los demás.

No dejes de soñar.

Todos tenemos sueños, muchos de ellos difíciles de cumplir. Todas las chicas hemos soñado con ser princesas de pequeñas, y los chicos con ser grandes futbolistas. Pero luego crecemos, y nos damos cuenta de que no existen los castillos de las películas y que solo hay un buen futbolista de cada cien. Nos damos cuenta de que son nuestros sueños los que poco a poco alimentaron nuestra felicidad, pero también nos han llegado a decepcionar. 
Pero la verdad es que me da igual, soñar me hace feliz.

Tanto miedo a la oscuridad y sin ella no podríamos disfrutar de estrellas como tú.

Déjame. Pero sin ropa.

Las cosas no se piensan, se hacen. Si esperas sentado a que te ocurran, estás perdido. La suerte no existe, hay que ganársela a pulso, todos los días. Las oportunidades, están ahí, esperándote. Solo hay que tener el valor de ir a por ellas. Si veo que algo me gusta, lo cojo. Por eso la gente es desgraciada, vive rodeada de cosas que le gustan, pero no salen a por ellas.